Una de las principales amenazas financieras son las deudas de tarjetas de crédito. Para poder mantener unas finanzas ordenadas y lograr ahorrar, tenés que empezar por liquidar deudas de tarjeta de crédito, ya que tienen tasas de interés más altas que la mayoría de los préstamos.
Te recomendamos empezar por desarrollar un plan y seguirlo. En esta nota vamos a compartir una serie de consejos útiles para poder repuntar tus finanzas.
¿Qué hacer si tengo varias deudas de tarjetas de crédito?
La repuesta es: enfocate de a una a la vez. Empezá por asegurarte de pagar el mínimo mensual en cada tarjeta. El siguiente paso es, además, intentar pagar el saldo total de una de las tarjetas. Asegurate escoger la que tiene menor tasa de interés.
Otro consejo puede ser implementar el método bola de nieve para liquidar deudas de tarjeta de crédito. ¿Cómo funciona? Consiste en pagar primero la tarjeta que tenga el saldo más bajo. Una vez que hayas abonado el total, utilizá el dinero que destinabas al interés en esa deuda para ayudar a pagar el siguiente saldo más bajo.
Pagá más que el mínimo
Revisá el estado de tu cuenta de tarjeta de crédito. Si pagás el mínimo, te lleva mucho más tiempo llegar a pagar el total. Si pagás más que el mínimo vas a lograr abonar menos intereses en total.
Consolidar tu deuda de tarjetas de crédito te permite combinar saldos con intereses más altos en una con una tasa más baja. ¿Y eso cómo te beneficia? Te permite pagar tu deuda más rápido y disminuir el pago total.
Revisá tus gastos
Te aconsejamos empezar clasificando gastos mensuales como comida, transporte, vivienda y entretenimiento. Luego, identificá ítems donde podés disminuir gastos y utilizá ese dinero para ir pagando tu deuda.
Los expertos aconsejan pagar las compras con dinero en efectivo. Usar dinero en efectivo o tarjeta de débito puede ayudarle a evitar gastar de más o hacer compras impulsivas. Esto además, genera que se eliminen cargos adicionales y por supuesto permite tener una visión clara de cuánto dinero sale y entra semanal o mensualmente.
Invertí en vez de incrementar la deuda
Siempre que ingrese dinero de aumentos, bonos y otras ganancias financieras elegí destinarlo a saldar tu deuda de tarjeta de crédito. Reducí tu deuda en vez de seguir gastando. De esta manera, podés alcanzar tus metas de pago más rápido de lo que pensabas.
Cómo controlar los gastos de tarjeta de ahora en más
Una vez que puedas saldar tu deuda es importante que aprendas a gestionar tus gastos para no volver a pasar por esa situación. Por eso es importante que crees un sistema a tu medida que puedas sostener en el tiempo y que sea simple y eficaz.
Una excelente manera de controlar tus gastos es a través de las hojas de cálculo de Excel. Esta herramienta te permite optimizar tus finanzas personales y empresariales. No tiene costo alguno y es muy predictiva para usar.
Te facilitará un control de tus gastos y tener a la vista los movimientos de tu tarjeta. Todos sabemos que la principal contra de las tarjetas de crédito es que te permite realizar pagos sin que aplique descuentos automáticos. Pero al final del mes eso que era positivo puede convertirse en negativo si no tenés un control consciente de tus gastos.
Tus gastos (egresos) totales no deberían superar tu saldo disponible (ingresos). Si podés llevar un control de gastos de tarjeta y de cuotas mensuales, usar con consciencia tu tarjeta de crédito puede ayudarte a acceder a productos o servicios con precios altos sin complicar tus finanzas personales. ¡Pero ojo! Si no sos capaz de controlarlos, las tarjetas de crédito pueden ser tu peor enemigo, porque te permitirán gastar de más y te acumularán deudas con intereses poco convenientes.
Para que eso no suceda, un consejo útil es que, además de controlar tus gastos, solicites a tu entidad financiera que aplique los pagos de tarjeta de manera automática. ¿Qué significa esto? Que pagarás el total de tus gastos mensuales sin tener que acumular deuda al próximo mes ni tener que sufrir los intereses.
La clave es llevar tus finanzas personales de manera consciente para que los gastos no se vuelvan un dolor de cabeza el día de mañana. Aunque no lo creas las tarjetas de crédito pueden ser aliados financieros siempre y cuando sepas utilizarlas.